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Yo jamás me había subido a un escenario tan grande. Pero es bonita la sensación de que poquito a poco van pasándote cosas fruto del empeño, del trabajo y la ilusión. Este fin de semana he aprendido cosas de personas que llevan ya mucho recorrido, he conocido, he reído, suspirado, he visto a algunos dejarse la piel para que estuviera a gusto allí encima, he llorado de alegría, he disfrutado en el escenario... auque tengo que admitir que tal vez ese escenario tan alto aún no esté hecho para mi, y me de un poco de vértigo. Lo cierto es que subí, suspiré, temblé... y canté sintiéndolo por dentro. Los nervios ya no existieron en la segunda canción gracias a esas voces cercanas y siempre quedará en mi el agradecimiento de haber sido escogida entre 63, de habérseme dado la oportunidad de tener esta experiencia que me ha hecho enriquecerme y crecer un poco, y sobre todo de aprender algunas cosas más valiosas que van más allá de lo material y lo tangible. Como dice mi amigo el Principito, "Lo esencial es invisible a los ojos". Me llevo muchísimo.
(Gracias por las camisetas...)
(y a los que estuvísteis de cuerpo, o de mente)
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